En el camino hacia la optimización de nuestros procesos industriales y de gestión, hemos contratado recientemente al Instituto Kaizen y juntos estamos trabajando en la mejora de los procedimientos y formas de actuar para lograr una mayor eficiencia.
Impulsado por la filosofía japonesa Kaizen, de la que repite el nombre, el Instituto Kaizen es conocido por su asesoramiento y apoyo a las empresas con vistas a su mejora incremental y continua. Combinando diversas herramientas y métodos de transformación colaborativa, su actuación pretende garantizar un rendimiento ejemplar en las distintas áreas de la empresa, identificando problemas y oportunidades de mejora y apoyando la implantación de las respectivas soluciones.
La optimización del proceso productivo es uno de los grandes objetivos de nuestra marca que, en los últimos años, ha invertido significativamente en una reorganización estructural y transformación digital, con la adquisición de maquinaria de última generación, la reestructuración del espacio de la fábrica y el almacén y la implantación del Shop Floor Management.
Todas estas medidas permiten la integración e interconexión de todos los sistemas, procedimientos y flujos de información, desde las distintas líneas de producción hasta la logística, la ingeniería, el marketing y otros departamentos, lo que posibilita procesos más eficaces y soluciones más optimizadas y cualificadas.
José Souto, director de Operaciones de Grupel, nos cuenta las intenciones de la empresa con esta asociación y la importancia de actualizar y modernizar constantemente los procesos para garantizar una mayor eficiencia y un posicionamiento cada vez más fuerte en el mercado:
“La colaboración con Kaizen surge en relación con el proceso de integración y digitalización, hacia la Industria 4.0, en el que estamos inmersos. El objetivo es alcanzar una producción de 100 unidades semanales con un solo turno de producción de 8 horas y 5 días laborables, lo que presupone la reformulación de los procesos operativos y el aumento de nuestra capacidad y la eficiencia del turno. El resultado esperado será la producción de un generador cada 20 minutos.
Los cambios son transversales a todos los departamentos implicados en la producción, pasando de la producción por lotes a la producción por unidades just in time. De este modo, tendremos un máximo de 12 unidades en el flujo de la línea en lugar de las 40 que tenemos a veces. De este modo, se mejorarán las condiciones de trabajo de todos los colaboradores y se aumentará la eficacia. Todos los materiales y operarios se están reposicionando para reducir los tiempos de parada y los movimientos innecesarios. Podremos producir más rápido y con menos esfuerzo.
Además, teniendo en cuenta que nuestro espacio es limitado, estamos tratando de optimizar nuestras instalaciones para poder producir lo máximo posible en ellas, de modo que tengamos una fábrica que pueda absorber el crecimiento que queremos alcanzar desde hace varios años.
La mejora continua es importante, no sólo para Grupel, sino para todas las empresas a nivel global que quieran evolucionar y adaptarse a las nuevas necesidades del mercado, digitalizando todas las áreas de la empresa para ser ‘punta de lanza’ en el sector.”
Para una empresa como Grupel, enfocada en el cliente, la optimización de su proceso productivo es una prioridad. Sólo de esa manera conseguimos que nuestro trabajo sea más eficiente en tiempo y costes, y que nuestras soluciones se ajusten cada vez más a las necesidades y requisitos de nuestros clientes y a las exigencias del mercado, con el menor plazo de entrega posible.
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